“Se levantará nación contra nación y reino contra reino.” (Mateo 24:7.) En los últimos cien años han muerto millones de personas a causa de las guerras. Un historiador británico escribió: “El siglo XX fue el más sangriento de la historia. [...] Fue un siglo en el que hubo guerras casi de continuo, pues solo en unos pocos y breves períodos no se produjeron conflictos armados en ningún lugar”. Un informe del Instituto Worldwatch indica: “En las guerras [del siglo XX] hubo el triple de muertos que en todas las guerras desde el siglo I después de Cristo hasta 1899”. Más de cien millones de seres humanos han fallecido por esta razón desde 1914. Así pues, las guerras han dejado a una enorme cantidad de personas sin sus seres queridos. Tal vez usted mismo ha pasado por esa dolorosa experiencia.
“Se levantará nación contra nación y reino contra reino.” (Mateo 24:7.) En los últimos cien años han muerto millones de personas a causa de las guerras. Un historiador británico escribió: “El siglo XX fue el más sangriento de la historia. [...] Fue un siglo en el que hubo guerras casi de continuo, pues solo en unos pocos y breves períodos no se produjeron conflictos armados en ningún lugar”. Un informe del Instituto Worldwatch indica: “En las guerras [del siglo XX] hubo el triple de muertos que en todas las guerras desde el siglo I después de Cristo hasta 1899”. Más de cien millones de seres humanos han fallecido por esta razón desde 1914. Así pues, las guerras han dejado a una enorme cantidad de personas sin sus seres queridos. Tal vez usted mismo ha pasado por esa dolorosa experiencia.
Violencia |
“Habrá escaseces de alimento.” (Mateo 24:7.) Los investigadores dicen que en los últimos treinta años
ha aumentado mucho la producción de alimentos. Sin embargo, sigue habiendo
escasez porque mucha gente no tiene terreno donde cultivar los alimentos
ni dinero para comprarlos. En los países en desarrollo, más de mil
millones de personas sobreviven con muy poco: un dólar al día, o incluso menos.
Y la mayoría de ellas sufren de hambre crónica. La Organización
Mundial de la Salud señala que la desnutrición es uno de los principales
factores que contribuyen a que mueran más de cinco millones de niños al año.
Hambre |
“Habrá grandes terremotos.” (Lucas 21:11.) Según el Servicio Geológico de Estados Unidos, tan solo
desde 1990 ha habido un promedio anual de diecisiete terremotos lo
bastante intensos como para dañar edificios y agrietar la tierra. Y casi
todos los años ha habido también terremotos que han causado la destrucción
total de edificios. Otra fuente de información indica: “En los últimos cien años
han muerto cientos de miles de personas debido a los terremotos, y los
adelantos tecnológicos solo han logrado reducir un poco esa cantidad”.
“Habrá [...] pestes.” (Lucas 21:11.) A pesar de los avances de la medicina, la humanidad
está plagada de enfermedades, tanto antiguas como nuevas. Según cierto informe,
en las últimas décadas se han hecho más comunes veinte enfermedades que ya se
conocían —como la tuberculosis, el paludismo (o malaria) y el cólera—, y otras
se han vuelto cada vez más difíciles de curar con medicamentos. Además, han
aparecido por lo menos treinta enfermedades nuevas. Algunas de ellas son mortales
y hasta ahora no tienen cura.
LA GENTE DE LOS
ÚLTIMOS DÍAS
La Biblia no solo predijo
que los últimos días estarían marcados por ciertos sucesos mundiales, sino
también por un cambio en la sociedad humana. El apóstol Pablo describió cómo
sería la gente en general. En 2 Timoteo 3:1-5 dice: “En los últimos
días se presentarán tiempos críticos, difíciles de manejar”. Estas son algunas
de las características que tendrían las personas, según indicó Pablo:
▪ amarían el dinero
▪ no obedecerían a sus padres
▪ serían desleales
▪ no sentirían cariño natural
▪ no sabrían dominarse
▪ serían feroces
▪ amarían los placeres más bien que a Dios
▪ aparentarían tener devoción a Dios, pero con sus hechos demostrarían
que esta no tiene poder en su vida
¿Se ha vuelto así la gente de su
comunidad? Seguramente. Por todas partes hay personas que se comportan de ese
modo. Esto muestra que Dios actuará pronto, pues la Biblia dice: “Cuando los
inicuos [o malos] brotan como la vegetación, y todos los practicantes de lo que
es perjudicial florecen, es para que sean aniquilados para siempre” (Salmo
92:7).
LOS SUCESOS POSITIVOS
En estos últimos días hay, sin
duda, muchas dificultades, tal como predijo la Biblia. Sin embargo, entre los
siervos de Jehová tienen lugar algunos sucesos positivos.
“El verdadero conocimiento se hará abundante”,
profetizó el libro bíblico de Daniel. ¿Cuándo se cumplirían esas palabras? En “el
tiempo del fin” (Daniel 12:4). Desde 1914 en particular, Jehová ha ayudado
a quienes desean servirle a que comprendan mejor algunas verdades bíblicas muy
valiosas. Por ejemplo, las que tienen que ver con el nombre y el propósito de
Dios, el sacrificio de Jesucristo, el estado de los muertos y la resurrección.
Los siervos de Jehová han aprendido también a llevar una vida que los beneficia
a ellos y alaba a Dios. Han entendido con más claridad lo que es el Reino de
Dios y cómo arreglará la situación de la Tierra. ¿Qué hacen con ese
conocimiento? Esta pregunta nos lleva a otra profecía que se está
cumpliendo en estos últimos días.
“Estas buenas nuevas
del reino se predicarán en toda la
tierra habitada”, dijo Jesucristo en su profecía sobre “la
conclusión del sistema de cosas” (Mateo 24:3, 14). Por todo el planeta se
están predicando las buenas nuevas del Reino, es decir, lo que es el Reino, lo
que hará y cómo podemos recibir sus bendiciones. Estas buenas noticias se
llevan a más de doscientos treinta países y se presentan en más de
cuatrocientos idiomas. Millones de testigos de Jehová procedentes de ‘todas las
naciones, tribus, pueblos y lenguas’ predican con entusiasmo las buenas nuevas
del Reino (Revelación 7:9). Además, dan clases bíblicas gratuitas a millones de
personas que desean saber lo que enseña realmente la Biblia. Sin duda
impresiona ver cómo se está cumpliendo esta profecía, sobre todo si se tiene en
cuenta que Jesús predijo que los verdaderos cristianos serían “objeto de odio
de parte de toda la gente” (Lucas 21:17).
¿Y QUÉ HARÁ
USTED?
En vista de que en la actualidad
se están cumpliendo tantas profecías bíblicas, ¿no cree que vivimos en los últimos
días? Las buenas nuevas se van a predicar hasta que Jehová quede satisfecho, y
entonces sin falta “vendrá el fin” (Mateo 24:14). “El fin” se refiere al
momento en el que Dios eliminará la maldad de la Tierra. Mediante Jesús y los
poderosos ángeles destruirá a todas las personas que se empeñen en oponerse a él
(2 Tesalonicenses 1:6-9). Satanás y sus demonios ya no engañarán más
a las naciones. Después de eso, el Reino de Dios traerá muchas bendiciones a
todos los que se sometan a su justo gobierno (Revelación 20:1-3; 21:3-5).
Como el fin del sistema de Satanás
está cerca, cada uno de nosotros tiene que preguntarse: “¿Qué debería estar
haciendo yo?”. Lo más sabio es seguir aprendiendo acerca de Jehová y de lo
que él espera de nosotros (Juan 17:3). Estudie la Biblia con interés y esmero.
Acostúmbrese a asistir a las reuniones que celebran quienes se esfuerzan por
hacer la voluntad de Jehová (Hebreos 10:24, 25). Adquiera el abundante
conocimiento que él nos ofrece a todos, y haga los cambios necesarios para
agradarle (Santiago 4:8).
Jesús predijo que la mayoría de
la gente no prestaría atención a las pruebas de que vivimos en los últimos
días. La destrucción de los malvados llegará de pronto, cuando nadie lo
espere, y tomará por sorpresa a casi todo el mundo, como lo hace el ladrón que
actúa de noche (1 Tesalonicenses 5:2). Jesús advirtió: “Así como eran los
días de Noé, así será la presencia del Hijo del hombre. Porque como en aquellos
días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, los hombres casándose y las
mujeres siendo dadas en matrimonio, hasta el día en que Noé entró en el arca; y
no hicieron caso hasta que vino el diluvio y los barrió a todos, así será
la presencia del Hijo del hombre” (Mateo 24:37-39).
Por lo tanto, Jesús advirtió: “Presten
atención a sí mismos para que sus corazones nunca lleguen a estar cargados
debido a comer con exceso y beber con exceso, y por las inquietudes de la
vida, y de repente esté aquel día sobre ustedes instantáneamente como un lazo.
Porque vendrá sobre todos los que moran sobre la haz de toda la tierra. Manténganse
despiertos, pues, en todo tiempo haciendo ruego para que logren escapar de
todas estas cosas que están destinadas a suceder, y estar en pie [es decir,
aprobados] delante del Hijo del hombre” (Lucas 21:34-36). Debemos tomar en
serio las palabras de Jesús. ¿Por qué? Porque las personas que tengan la
aprobación de Jehová Dios y del “Hijo del hombre”, Jesucristo, podrán
sobrevivir al fin del mundo de Satanás. Y además, podrán vivir para
siempre en el maravilloso nuevo mundo que tan cerca está (Juan 3:16; 2 Pedro
3:13).
No hay comentarios:
Publicar un comentario